A simple vista La Calzada parece un barrio cualquiera, aunque muy guapo y agitado. Pero cuando vas por sus calles te encuentras como fantasmas del pasado esos nombres que te hacen pensar de dónde vinieron: La Algodonera, El Cerillero…; o de personas que no sabes quiénes fueron; o de referencias de la gente cuando al pedir una dirección te dicen «en la antigua fábrica de refrescos» o «la cervecera»; o una chimenea enorme que hace mucho tiempo que no echa humo…
La presente exposición se ha organizado contando con la colaboración de un grupo de trabajo constituido a partir del proyecto de participación ciudadana «RE» (www.reiniciativa.blogspot.com.es) llevado a cabo en el Ateneo La Calzada el pasado año2014. Daniel Ordoñez presentó la propuesta La Calzada, barrio de las industrias.
Recuperación histórica, que planteaba profundizar en el trabajo que él lleva realizando a lo largo de las ediciones de «Amigos de La Calzada», y que no es otro que recuperar la historia oficial y testimonial de La Calzada con la participación de las entidades y personas del barrio. Alrededor de este objetivo, y junto a Daniel Ordóñez, Ariadna Moneo, David Cuenca, Benigno Montenegro, Sonia Blanco, Cristina Fernández y Elvira Juárez han colaborado en la planificación y producción de la exposición Un barrio, un astillero, Juliana, y el grupo como tal se plantea continuar en el futuro con este trabajo de recuperación de la memoria histórica. Colabora también la Fundación Municipal de Cultura, Educación y Universidad Popular, a través del Departamento de Proyectos Culturales.
Una (muy) breve historia de Juliana
El 6 de diciembre del año 1900, Domingo Juliana y Albert, comerciante ovetense, Ceferino Valdés y González, médico gijonés, Julián Creus y Marsans, industrial barcelonés, y el gijonés Daniel de la Cerra y Cerra fundan la factoría La Constructora Gijonesa S.A., con un capital inicial de 500.000 pesetas en la finca «La Pedraza», situada en el barrio de Sta. Eulalia (Olaya) donde ya existía un taller —el «Tallerón de Genaro» o «Taller de Genarón—. Su objetivo inicial no tenía nada que ver con la construcción naval, sino que era la fabricación y venta de materiales de construcción: piedra artificial, mármoles, ladrillos, etc.
En 1910 la sociedad diversifica su producción, introduciéndose en el campo de las construcciones metálicas: puentes, cubriciones, depósitos de agua… Ejemplo significativo de esta nueva etapa es el puente de Perlora para el paso del ferrocarril de Carreño sobre el río Espasa.
En el año siguiente, 1911, en las inmediaciones del muelle del Fomento, se construye el primer barco, el Antonio López, botado el día 2 de marzo de 1912, entrándose cuatro años después, en el Gijón de 1916, en el apogeo de la construcción naval en la ciudad.
La familia Juliana, a su vez propietaria de otras empresas, adquiere en 1925 el 100% de las acciones de la sociedad, cambiando su denominación inicial por la de S.A. JULIANA y dedicándose durante años a las construcciones metálicas en general, fundición de hierro, maquinaria de minas y obras públicas, maquinaria para azucareras, etc. En 1934 se acuerda un nuevo cambio en la denominación de la sociedad pasando por fin a denominarse S.A. JULIANA CONSTRUCTORA GIJONESA.
Tras la Guerra Civil y la militarización de la empresa, en el año 1941 la Factoría, aprovechando su situación privilegiada en la bahía de El Musel, se expansiona y orienta su actividad fundamental hacía el mar con la construcción de buques pesqueros y costeros de pequeño porte, dadas sus limitaciones de grada y de medios de elevación. Hasta el inicio de su modernización y expansión a partir de 1956, momento en que entra como filial de la Compañía Euskalduna de Construcción y Reparación de Buques, radicada en Bilbao, con larga tradición en este trabajo.
La construcción de viviendas para los trabajadores, la fusión con otras empresas del sector, nuevas obras de modernización, son hechos significativos desde esos años hasta su nuevo cambio de denominación, IZAR, Astillero Gijón, y el auge en la construcción y reparación de buques.
Con la última denominación del histórico astillero, FACTORÍAS JULIANA, S.A.U., ya privatizado, comenzará el declive hasta su cierre definitivo en 2010.
Todo el material para la elaboración de esta entrada está tomado de la página del Ayuntamiento de Gijón, de donde podéis descargarlo en el siguiente enlace:
EN MEMORIA DE DANI ORDOÑEZ, fallecido en enero de 2025.
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